La marca de audio austriaca AKG es uno de los nombres más importantes en el negocio de los micrófonos, con un ejército de usuarios fieles, y no es de extrañar. Sus productos son utilizados en todo el mundo por los profesionales de la industria del audio, especialmente algunos de sus modelos de gama alta. El C214 hace gala de algunas características de muy alta gama, aunque sigue teniendo un precio relativamente asequible – una de las razones por las que se encuentra entre los mejores micrófonos de condensador de menos de 500 euros que se pueden encontrar en el mercado actualmente. Es hora de verlo más de cerca…
Diseño
Desde el punto de vista estético, este micrófono tiene mucho que gustar. Esto se debe en gran parte al hecho de que hay algo verdaderamente vintage en el aspecto de este micrófono. Comparado con la mayoría de los condensadores modernos -incluso los de gran diafragma- el C214 parece una reliquia del pasado. Y nos encanta. Aparte de su rendimiento de primera clase, este diseño retro es una de las mejores cosas de este micrófono.
El chasis de metal fundido a presión es bastante corto y rechoncho, ya que la mayor parte del cuerpo del micrófono está formada por la rejilla de doble malla resistente a las abolladuras que cubre el enorme diafragma. Esta rejilla no está ahí sólo por estética (aunque tiene un aspecto bastante atractivo), ya que promete una alta inmunidad a los rayos X. Diseñado, fabricado y construido en Austria, es evidente que el C214 es un micro de calidad.
Características
Al abrir la tapa del C214 encontrará algunos componentes excelentes, como el diafragma de 1″ que se encuentra suspendido por un sistema muy complejo que ayuda a reducir el ruido mecánico. En términos de especificaciones, tenemos un rango de respuesta de frecuencia de 20Hz a 20kHz y un SPL máximo de 156dB, mientras que la salida XLR chapada en oro significa que se requiere una alimentación fantasma de 48v para usar este micrófono.
Con un patrón cardioide fijo, este micrófono de estudio no es tan personalizable como algunos de los que hemos presentado. Aun así, viene con algunas características sólidas como un pad de atenuación de -20dB así como un filtro de corte de bajos. También viene con un soporte antigolpes universal H85 y un maletín de transporte metálico rígido, que siempre son una adición bienvenida.
Sonido
Todo esto se reduce a un rendimiento encomiable. Para ser un condensador de gran diafragma, el C214 tiende a ser muy flexible. Las voces suenan muy suaves y cálidas tanto para voces masculinas como femeninas. De hecho, es uno de los micrófonos de gran diafragma más transparentes que se pueden encontrar en este rango de precios. La cantidad de claridad, definición y detalle es lo que define a este modelo de AKG.
Esto resulta bastante útil cuando se quiere capturar la verdadera naturaleza de un instrumento acústico, incluida la batería, y -con sus capacidades de alto SPL- se puede grabar casi cualquier instrumento acústico que se desee, sin arriesgarse a sufrir efectos negativos. No hace falta mucho tiempo con el AKG C214 para darse cuenta de por qué este micrófono es tan popular. Un equipo verdaderamente profesional
Conclusión
El C214 de AKG es uno de los pocos micrófonos de categoría profesional que todavía se pueden comprar por un precio relativamente razonable. La cantidad de detalles, la claridad y la pureza que ofrece es impresionante por cualquier estándar, mientras que la estética fresca son una ventaja añadida. Por mucho menos de 500 euros, no hay nada mejor que esto.
- Diafragma de 1"
- Patrón polar cardioide
- Sensibilidad: 20mV/Pa
